Esta historia me dejó la esperiencia más desagradables de mi vida. Y era joven, tenía 16 años y no sabía lo que hacía. Me enviaron una invitación que decía: " fiesta en la playa, el sábado a las 22:00h. Imprescindible traer alcohol.
Decidí ir a esa fiesta, me parecía divertido. Llegó ese día, me puse un vestido de noche y decidí ir. Allí estaba él, cada día me gustaba más, cuando lo veía me corría un escalofrío por el cuerpo. Decidí ir a hablar con él después de un par de horas bebiendo alcohol trajeron unas pastillas muy extrañas con dibujos, me dijeron que si me tomaba una me lo pasaría mejor, y decidí tomarme una, Después él se tomo dos de estas y me dijo que me quería, me besó y empezó a decir cosas bonitas. Empecé a marearme y a vomitar, parecía extraño y me dijeron que eso no era por la pastilla. Él me empezó a besar hasta el extramo que me gustó tanto que decidimos hacerlo, pero sin protección.
Me contaron que vomite y unos polícias me encontraron en la playa tirada y me llevaron a comisaria, allí me vino a buscar mi madre.
Ahora estoy en mi casa tomando pastillas, ya que después de aquello me encontraron epilepsia, por culpa de esas pastillas y con un cargo muy importante, el de ser mama. El niño también tiene epilepsia y no esta del todo bien. Su padre se fue a Canadá y no he vuelto a saber nada de él. Aquello que ne tomé era droga, la que me destrozó la vida, ojalá no hubiera ido a esa fiesta...
Hecha por Mari.
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